marcalj, para que veas que es cuestión de potencia y estamos trabajando con números de combinaciones jodidamente grandes (muy jodidamente grandes x))
Pongamos que trabajamos con 25 carácteres, ¿vale?
Una password de 1 cifra serán 25 combinaciones,
una password de 2 cifras serán 2525 combinaciones,
una password de 3 cifras serán 2525*25 combinaciones (ya estamos hablando de 15.625 posibles combinaciones para tan solo tres cifras) así que usando potencias podemos saber que una password de, pongamos, 8 cifras tiene 25^8 combinaciones diferentes (esto son 152.587.890.625 combinaciones ciento cincuenta y dos mil millones y medio más o menos. Si el PC de Khronos procesaba 500.000 claves por segundo hacemos un pequeño cálculo del que sacamos que necesitaría 84 horas para probar todas las combinaciones.
Por cierto, ahora me doy cuenta de que he metido la pata porque md5 también usa números, con lo que los cálculos para 8 carácteres y 35 cifras nos daríán que khronos necesitaría 1251 horas para probar todas las combinaciones (52 días enteros).
Ah, si hilamos fino md5 no cifra, simplemente hace un digest (una especie de resumen), por eso se usa para calcular la integridad de lo que nos bajamos de internet (lo habréis visto todos aquellos que hayais bajado alguna distro linux).
Si os interesa el tema y os gusta leer os recomiendo una novela de Neal Stephenson llamada Criptonomicón. A parte de ser una historia genial (bueno, más de una) aprendes bastantes cosillas de criptografía
Una trozo del libro que citan en un artículo de Kriptopolis dice así:
_"Cuanto más larga es la clave que quieres generar, más largo es el proceso. Randy intenta generar una ridículamente larga. Le ha comentado a Avi, por medio de un mensaje cifrado, que si cada una de las partículas de materia del universo pudiese emplearse para construir un único superordenador cósmico, y ese ordenador trabajase en intentar romper la clave de cifrado de 4096 bits, le llevaría más tiempo que toda la vida estimada del universo.
Empleando la tecnología actual -le respondió Avi- eso es cierto. Pero ¿qué hay de los ordenadores cuánticos? ¿Y si se desarrollan nuevas tecnologías matemáticas que simplifiquen la factorización de grandes números?
-¿Cuánto tiempo quieres que sean secretos esos mensajes?- le preguntó Randy en el último mensaje antes de abandonar San Francisco-. ¿Cinco años? ¿Diez años? ¿Veinticinco años?.
Después de llegar al hotel esa tarde, Randy descifró y leyó la respuesta de Avi. Todavía la tiene colgada frente a los ojos, como la imagen remanente de un flash:
- "Quiero que sigan siendo secretos mientras los hombres sean capaces del mal."
(Neal Stephenson, "Criptonomicón")_