Pues realmente, el proceso no tiene ningún misterio, pese a lo que pueda parecer.
La cosa pasa por irse a la web del fabricante de tu placa, irte al apartado de soporte ("Support") o las descargas ("Downloads"), dependiendo de qué web estemos hablando, y bajarte la última versión del BIOS de TU placa base (mucho ojo: asegúrate BIEN de que estás bajando el BIOS para tu modelo EXACTO de placa, porque si te equivocas, la puedes cagar hasta el fondo ) y el programa que se ocupará de flashearla en el chip (que también debe venir en esa misma web).
Luego, coges un disquete, y lo formateas desde Windows para convertirlo en un disco de inicio de MS-DOS. Si estás en Windows XP, basta con que te vayas al Explorador de Windows, selecciones la unidad de disquete y pinches con el botón derecho, para elegir Formatear. Activas la opción "Crear disco de inicio de MS-DOS" y le das formato al disco. A continuación, copias al disquete el programa que usarás para el flasheo y el archivo binario del BIOS actualizado.
Reinicia el PC con el disquete insertado y entra en la utilidad de configuración de tu BIOS, para habilitar (MUY IMPORTANTE) la opción de actualización del BIOS ("BIOS Update"). Este paso es crucial, pues puedes encontrarte con que, después de armar todo este jaleo, el BIOS "no se deje" flashear, y te puedes quedar más colgado que un abrigo en agosto (como me pasó a mí la última vez que actualicé mi BIOS) :muerto:
Si no encuentras la opción, o si ya la tienes habilitada, sal y reinicia el PC.
Llegó el momento de la verdad. Deja que el PC arranque el SO que contiene el disquete. Cuando haya cargado todo, deberás invocar al programita de marras, escribiendo su nombre. Realizará una serie de comprobaciones al BIOS que tienes ahora y te informará de su versión, fecha y demás historias. Típicamente, te preguntará si la quieres actualizar o si quieres hacer una copia de seguridad de la que tienes ahora. Tú eliges, aunque no es mala idea esto último, por, si falla el proceso, poder dejarlo como estaba.
El caso es que, cuando te hayas decidido, dile al programa que quieres actualizar de una vez por todas. Te pedirá que le especifiques el nombre de archivo que contenga el nuevo BIOS a flashear. Se lo indicas, y esperas unos segundos a que el programa lo cargue. Una vez hecho esto, llega el momento crucial: te pedirá confirmación para iniciar el proceso de programación. Dile que sí, y cruza los dedos.
Ten cuidado, porque una vez que confirmes la actualización, NO hay vuelta atrás. Debes procurar que el proceso NO SE DETENGA, bajo ninguna circunstancia. No sería mala idea conectar el PC a un SAI, si lo tienes: de este modo, si se va la corriente (ya sabes, Ley de Murphy powah :D) el proceso puede terminar (sólo dura unos segundos) sin problemas. El caso es que, sea como sea, una vez que haya empezado, debe terminar a toda costa.
Una vez que el programa te muestre el tranquilizador mensaje de "Update finished. Please, reboot your computer to complete the process" (o algo así), puedes respirar tranquilo, retirar el disquete de la unidad y reiniciar.
Lo último ya. Entra de nuevo en el Setup de tu nuevo BIOS y carga los ajustes predeterminados ("Load Setup Defaults") para actualizar la configuración con las nuevas prestaciones que el nuevo BIOS pueda incluir. Sal y guarda los cambios. En el siguiente reinicio, vuelve a entrar, y configura de nuevo las opciones a tu gusto.
Y ya está. Tu nuevo BIOS estará operativo
Saludetes
PD: Se me olvidaba. Cuando formatees el disquete, debes asegurarte de que está en PERFECTO estado. Es decir, que si Windows informa de que contiene sectores defectuosos, TIRA ese disco y coges otro. No vale la pena intentar reparar esos sectores y arriesgarte a que algunos de los datos que copies en el disco se corrompan, lo que puede ser fatídico a la hora del flasheo. Una caja de disquetes vale ahora unos 3 lerus, así que, si no tienes discos en buen estado, no me seas rácano, y baja a la tienda más cercana a comprar disquetes nuevos